Después de las promesas tienen que llegar los hechos. Es lo que piensan los inmigrantes latinoamericanos de EEUU. Según la BBC, han enviado ya 10.000 cartas al presidente Barack Obama para pedirle una reforma migratoria. Una demanda de difícil cumplimiento en plena crisis. Y es que con decenas de miles de trabajadores estadounidenses sumándose diariamente a las filas del paro, dicen algunos analistas, no es razonable pedirle ahora al presidente que facilite a los inmigrantes su ingreso al mercado laboral.
Pero las expectativas son muy altas y los inmigrantes latinos no pueden esperar. El temor a la deportación es un fantasma real y no entiende real politik. Así rezaba una de las misivas, escrita por Alejandra, una niña de 11 años:
Pero las expectativas son muy altas y los inmigrantes latinos no pueden esperar. El temor a la deportación es un fantasma real y no entiende real politik. Así rezaba una de las misivas, escrita por Alejandra, una niña de 11 años:
"Mr. President Barack Obama
The White House
1600 Pennsylvania Avenue
NWWashington, DC 20500
Te pedimos por favor que pares las redadas de
emigración porque a mí me da mucho miedo por mis padres que se los lleven y que por favor des una amnistía para los papeles. Gracias".
Marcha migrante
Mientras, varias organizaciones pro inmigrantes han iniciado una travesía, bautizada como marcha migrante, que los llevará a cruzar todo el país para recordarle al presidente su promesa de modificar la ley migratoria. Es hora de cumplir lo prometido, es su lema.
“Queremos recordarle al presidente Obama que tiene que
cumplir con sus promesas a los hispanos que lo ayudaron
a llegar a donde está”
Así, se expresa Enrique Morones, líder de los Ángeles de la Frontera una ONG que lucha por evitar las muertes innecesarias de las personas que cruzan por el desierto del Valle Imperial y las montañas alrededor del condado de San Diego.
Obama no lo tiene nada fácil. Ha hecho demasiadas promesas y ahora no podrá cumplirlalas. Los latinos que le han llevado a la Casa Blanca tendrán una gran decepción.
ResponderEliminarEmiliano